terribles dos
|

Los Terribles Dos…¿Existen?

Comparte con tus Amigas!

terribles dosLlegaron los dos años de nuestro hijo.  Los conocidos como los terribles dos. Lo vemos llorando, pataleando, pasar del agrado a la furia en dos segundos. Esa negativa constante.

Pasaron de ser esos bebitos que nos complacían con casi todo, a estos niños que nos sacan problemas por todos lados, a los que les decimos NO veinte veces al día y nos los regresan multiplicados.

Entonces nos preguntamos: ¿Estaré haciendo las cosas bien? ¿Será normal? ¡Que se terminen estos terribles dos! ¡Pero ya! Y prepárate. Luego siguen los imposibles tres. Y para terminarla de ajustar, nunca falta quien en medio de este remolino, te pregunte: ¿Para cuándo el hermanito?

Pero, ¿Existe de verdad esta terrible etapa? Aunque, es un término ampliamente acuñado por padres y psicólogos en Estados Unidos y otros países, no es universal. Sí! leíste bien. Hay niños de dos años en otras partes del mundo que no sacan de quicio a sus padres.

Otros lugares del mundo

En Zinacantán, México, no es típico que los infantes se vuelvan demandantes y resistentes al control de sus padres. En lugar de afirmar su independencia de sus madres, la primera infancia en Zinacantán es el momento en que los niños pasan de ser los bebés de mamá a ser los ayudantes de mamá, niños responsables que pueden ayudar a cuidar a un bebé nuevo y quienes ayudan con las tareas de la casa (Edwards, 1994).

Un patrón de desarrollo similar ocurre en las familias mazahuas de México y entre las familias mayas de San Pedro, Guatemala. Los padres de San Pedro “no informan de una edad específica en la que esperan que los niños se vuelvan especialmente desafiantes o negativos” (Mosier y Rogoff, 2003, p. 1058).

Métete en sus zapatos

Por un momento, mete esos pies adultos dentro de los zapatitos talla 23 de tu hijo de dos años. Imagina que tienes a esta persona marcando el ritmo de TODO, absolutamente todo.  Aunque ya sabes hacer muchas cosas, te quieren arrebatar esas dulces conquistas en todo momento. Tu cerebro tiene desarrollada la voluntad, pero está empezando apenas a desarrollar la autorregulación. Tu control de impulsos es pobre y al mismo tiempo, te apresuran, te quieren silencioso, te tienen en clases que estimulan todo tu potencial, pero nada de ser independiente.

En casa no eres lo suficientemente experto, como para hacer esas cosas que has aprendido. Seguro que debe ser difícil estar en un mundo donde todo es casi instantáneo y tú muchas veces necesitas más tiempo para hacer las cosas o responder preguntas, porque aún estás aprendiendo.

Agrega que estás empezando a formar frases sencillas y muchas veces al no lograr expresar lo que deseas o sientes, sólo puedes llorar o estar enojado. Todos te hacen sentir mal por ser así, un niño pequeño desarrollando habilidades sofisticadas de autorregulación.

 ¿Nos afecta?

Los terribles dos, realmente describen nuestros sentimientos como padres, no a nuestros pequeños. Para un adulto resulta realmente difícil ceder el control, la cercanía y el ritmo de las cosas, a un pequeño niño de dos años. Y sí, lo pasamos terrible y nuestro hijo lo pasa fatal.

En consulta, he tenido a padres quejándose de su hijo que no se deja guiar.  Por supuesto que nuestros pequeños aún necesitan muchos cuidados y guías, pero depende cómo presentes esa ayuda, así responderá tu hijo.

Somos seres sociales, nuestro cerebro viene programado para el trabajo en equipo. Así que en lugar de pisotear la autonomía de nuestros pequeños, invitémoslos a trabajar con nosotros, a ayudarnos en casa en pequeñas tareas, cuando  veas que le cuesta algo, no le digas: no puedes, dile hagámoslo juntos, dale tiempo y espacio. Abrázalo cuando esté frustrado, acompáñalo y respira profundo. Ya pasaste por el embarazo, el parto, el post parto, esto, también pasará y más rápido de lo que crees.

Te invito a re bautizar a los terribles dos, por los increíbles y maravillosos dos. Disfruta ver a tu pequeño crecer y convertirse en esta pequeña personita, con autonomía, convicción, voluntad, imaginación, ganas de explorar y ser sorprendido por el mundo. Déjate contagiar por todo eso, te darás cuenta, como yo lo hice, que en verdad están creciendo y aprendiendo juntos.

Así que, si tienes un pequeño hijo pasando por los maravillosos dos, muéstrale un camino más empático para pasar por esa etapa, ninguno de nosotros ha logrado tener un adecuado control de impulsos antes de los 5 años.

En el siguiente artículo publicaré actividades y alternativas positivas para poder disfrutar esta hermosa etapa.

Johanna Thiel

Psicóloga Especialista en Neurodesarrollo

 

 

Comparte con tus Amigas!

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.

Este post contiene enlaces de afiliados.  Si haces click en el enlace y haces una compra, yo recibo una comisión sin costo adicional para ti. Como un asociado de Amazon yo gano comision por compras que califican.